Los alumnos de tercer grado narraron cuentos de terror. Que bueno!!! A leerlos!!!
El secreto de la casa
embrujada
Había una vez unos niños que se llamaban: Luís, Juan, Fabricio y Santiago
Ellos siempre jugaban al
fútbol en una cancha. Pero un día el lugar
estaba ocupado por otros niños, entonces, los
chicos se fueron a la casa de Juan
y justo cerca de allí había una casona solitaria. Decidieron ir para ver
que había allí.
Luis abrió la puerta de la casa.
Entraron la puerta se cerro sola y pasó
justo un viento fuerte que ingreso
en el lugar. Además, las ventanas estaban cerradas, por eso, para
conocer más la casa, abrieron otra puerta. Desde esa otra puerta, salió una voz
extraña que decía…
-Soy Satanás y les digo que
se van a quedar en esta casa encerrados para siempre.
Después el fantasma
desapareció de la casa de la nada. Los chicos abrieron otra puerta y escucharon
una risa fuerte y muy rara...
Para sacarse la duda de quien era esa risa
tan fuerte y tan rara abrieron otra de las
puertas y en un instante apareció un tazón como si tuviera sopa, no
sabíamos qué era porque era verde. Estaba
sólo el tazón y que supiéramos,
no había nadie más. Pero de repente escuchamos de nuevo la risa fuerte y
todos los chicos que estaban conmigo, nos escondimos detrás de un sillón porque
había una señora que salía de la cocina con un sombrero con punta larga ¡ no
podíamos ver la cara de la señora por que
si no, nos iban a ver. Hasta que la señora se acercó hacia donde
estábamos escondidos y pudimos verle la cara. Tenía un
lunar muy grande y arrugas.
Justo nos movíamos para el otro lado y Juan movió
un jarrón y lo tiró, la señora por suerte no lo escuchó. Afortunadamente Juan lo agarró, pero lo puso mal, entonces el jarrón se cayó. La señora nos escuchó y nosotros intentamos escaparnos
pero la puerta estaba cerrada con llaves.
La señora no nos dejaba salir así que nos dijo:
-El que entra a mi casa no
sale nunca hasta que yo lo diga…
Nosotros rompimos la puerta de una patada y
nos escapamos. La bruja nos perseguía atrás y en el camino nos encontramos con
los demás: El fantasma con la voz de Satanás y la bruja con el gato negro y les
preguntamos porque estaban molestos y el
fantasma nos dijo:
-Porque estábamos en Haloween
y los chicos se molestaban con nosotros.
Entonces Juan le dijo algo
para que entendieran el fantasma y la bruja que no tenían porque molestarnos.
Fin
LA
CASA DEL FANTASMA:
Había
una vez un grupo de chicos que salieron a la noche para ver la luna y
encontraron una casa abandonada. La casa estaba muy sucia, con
telarañas. También encontraron cuartos abandonados y terroríficos.
Además se rompían los vidrios, las luces estaban rotas y ellos
tenían mucho miedo. De pronto, de la nada apareció un fantasma
endemoniado. Tenía un sólo ojo, de color verde y rojo, cara
deformada y lastimaduras en el cuerpo.
El
fantasma se comía a cualquier persona que veía, entonces ellos se
fueron corriendo a la biblioteca y encontraron un libro de hechizos.
Lo miraron y vieron que el fantasma tenía un poder. Podía
endemoniar a las personas y hacerlas esclavas y también decía que
su debilidad era el agua muy caliente. Entonces salieron de la casa
abandonada para buscar agua caliente y vencer al fantasma. Entraron
como locos. Y lo derrotaron.
Después
limpiaron la casa, se hizo de día y volvieron a sus casas sin
contarles nada a sus padres y dicen que la casa está buscando a sus
siguientes victimas para hacerlas esclavas del fantasma.
FIN
LA
MANSIÓN DEL MIEDO
Hace mucho, mucho tiempo, había un
grupo de amigos a los que les encantaba hacer cosas peligrosas. Todos
tenían 18 años y se llamaban: Támara, Nacho, Raquel, Miguel y
Tomás.
Un
día se propusieron que pasarían la noche en una mansión abandonada
y vieja que llevaba 100 años sin dueño según ellos sabían. Así
que estaba decidido; empacaron todo y se fueron a la mansión una
noche oscura y tormentosa. Llegaron y al abrir la puerta se escuchó
un ligero : “ñííí... Se pusieron a explorar la casa; era
oscura, había telarañas y pisos flojos; estaba algo destruída.
Encontraron una puerta que decía “sótano” pero había tanto que
explorar que no quisieron abrirla y siguieron buscando hasta que
encontraron una escalera floja. Los 5 amigos subieron por ella y
encontraron 5 habitaciones y pensaron : “qué casualidad, 5
habitaciones para 5 amigos, pero Tomás ya comenzaba a sentir un poco
de miedo.
Mientras
tanto, en el sótano había una bruja que estaba preparando una
poción. En el caldero había cola de cocodrilo, pata de cabra, ala
de búho y agua de pantano. Pero faltaba lo más importante... ojos
de adolescentes. La bruja, revolvía el caldo y pensaba: “mmmh
¿donde podré encontrar ojos de adolescentes sin salir de la
mansión?” En eso estaba cuando escucho las siguientes palabras:
“genial”, “que copado”, “ponele onda”, “no inventes”.
La bruja saltó de emoción, porque sabía que esas palabras solo
podían ser pronunciadas por adolescentes y salió del sótano.
Mientras
los amigos se divertían explorando el lugar, llegó un rayo de
magia. Tamara y Raquel sintieron un escalofrío. Nacho y Miguel eran
los únicos valientes. Todos vieron a la bruja y trataron de escapar.
“No escaparan” dijo y con un rayo de magia salieron un hombre
lobo, un vampiro, una momia y un fantasma. Los amigos estaban
rodeados. Ahora sí todos tenían miedo. La bruja trato de sacarle
los ojos a todos esos chicos. Por suerte, lograron escapar pero
salieron aterrorizados, muy, muy aterrorizados.
Los
5 amigos juraron no volver nunca más a esa mansión, ni contarle a
nadie lo que había pasado. Sin embargo alguien no guardo el secreto,
por eso yo sé esta historia. Lo tengo decidido, esta noche voy a
buscar a la bruja. ¿Me acompañan?
Fin